Calabaza Japonesa

Calabaza japonesa fresca: textura suave y sabor que reconforta

Alargada, de piel verde y pulpa clara, la calabaza japonesa es uno de los ingredientes más utilizados en la cocina casera mexicana. Su sabor suave y su textura tierna la convierten en un acompañamiento ideal para caldos, guisos y platillos tradicionales que buscan equilibrio y nutrición sin perder sabor.

Principales productores:
En México, esta variedad se cultiva principalmente en Sinaloa, Sonora, Baja California y Guanajuato, donde el clima cálido y los suelos fértiles permiten su producción constante durante gran parte del año.

Lo que la hace especial:
La calabaza japonesa es ligera, fácil de digerir y muy baja en calorías. Aporta fibra, vitamina C y potasio, y su alto contenido de agua la hace ideal para platillos frescos o de cocción rápida. Su piel es delgada, lo que permite cocinarla sin necesidad de pelarla.

Ideas para usarla:
Es excelente en caldos de pollo, sopas, guisos con jitomate y cebolla, y también puede asarse o cocerse al vapor. Se emplea en tortitas de calabaza con huevo, rellena al horno o en preparaciones más ligeras como ensaladas tibias. Su sabor se realza con epazote, ajo, comino o simplemente con sal y limón.